PLANA MAYOR

PLANA MAYOR

·        Diputados paternalistas con Tronco

Gaudencio García Rivera

La mayoría priista de la LXIII Legislatura local se ha convertido en el hazmerreír de propios y extraños porque por aquí decretan leyes y aprueban minutas constitucionales y por el otro lado son los primeros en violar las normas internas del Poder Legislativo. Son candil de la calle y oscuridad de su casa.

Los genios que rodean al bicéfalo líder cameral Juan Nicolás Callejas Arroyo —de los contados diputados que cobran doble en la nómina oficial como líder del Grupo Político de la Sección 32 del SNTE, más otras dotes que recibe del gobierno duartista—, son tan superiores a las enseñanzas de la doctrina política del florentino Nicolás Maquiavelo que permiten con toda la manga ancha que el converso diputado del PVEM, Renato Tronco Gómez, pisotee la ley orgánica de la Legislatura local, cuantas veces lo desee y le dé la gana.

Es el único de los 50 diputados que integran LXIII Legislatura local que falta a la mayoría de las sesiones plenarias en lo que va del año 2015, sin que la Junta de Coordinación Política a cargo del mofletudo Juan Nicolás Callejas, de la Presidencia de la Mesa Directiva y de la Comisión Unida de Gobernación, le aplique la ley por las faltas consecutivas a los acuerdos previos y a las sesiones plenarias sin aparente justificación —salvo los acuerdos o pactos verbales que existen en los drenajes del poder público— y, en consecuencia, llame a su suplente para que lo releve de sus funciones como legislador.

Renato Tronco, pariente del “Negro” Tronco, conocido en el argot político como el “Señor de los diezmos” durante el gobierno del defenestrado Fidel Herrera Beltrán “El innombrable” y en el actual de Javier Duarte, logró trascender a la gloria del poder público, gracias a los oficios del político de Nopaltepec quien lo hizo presidente municipal de Las Choapas, diputado local y de ahí repitió en los dos cargos de elección popular, por sugerencia del exgobernador Fidel “El negro” Herrera.

Folclórico, violento y converso —un personaje nacido del surrealismo político, gracias al liderazgo ejidal que ejerce en el convulso y marginado municipio sureño de Las Choapas, donde ejerce un poder omnímodo—, Tronco Gómez es el único legislador que se da el lujo de cobrar sus dietas sin tener que asistir para oprimir el timbre en las aburridas sesiones plenarias.

En más de una ocasión el desparpajado diputado cuasi “nine” ha denunciado a la prensa que por instrucciones del gobernador Javier Duarte, el líder cameral lo tenía congelado en las comisiones que tenía a su cargo y en las propias sesiones le negaban hacer uso de la tribuna, y por esa razón, dejó de asistir a la Legislatura desde mediados del año pasado.

Tolerancia, paternalismo o pactos en los drenajes del intríngulis político de sus homólogos, no le quitan el sueño al rijoso legislador choapanense porque ya ha anunciado que lanzará su candidatura a la gubernatura de Veracruz en 2016 —de 2, 5 o 6 años, como lo dictamine la controversia que espera turno por la SCJN—, por el partido político que lo quiera postular, o de plano, se iría como candidato independiente, aprovechando la generosidad de la reforma política del Código de Elecciones.

Para cerrar con broche de oro en su meteórica carrera política, Renato acaba de estrenar un video que él patrocinó con la banda xalapeña “Faraón de Chicago”, donde aparece montado en un brioso corcel negro y al fondo del grupo musical las iniciales de su nombre. Es una piedra en el zapato del gobierno duartista.

Y como epílogo recién adquirió una vieja casa tipo colonial, ubicada en la calle de Allende en Xalapa, que mandó a remozar, donde ubicó su bunker político, en una competencia con el líder sempiterno del Movimiento de los 400 Pueblos, César del Ángel Fuentes, quien también estrena sus nuevas oficinas en una vieja casona remodelada en céntrica calle xalapeña, gracias a su benefactor, el bipolar priista  Reynaldo Escobar Pérez. Comentarios a gaugar55@gmail.com o gau41@hotmail.com