Místicos y Terrenales
·
Duarte y su gobierno
¿culpables de la agresión?
·
Criminalizar a los jóvenes,
otra vez
·
Clima de violencia
preelectoral
Marco Antonio Aguirre Rodríguez
Tal vez el gobierno de Javier Duarte no tuvo nada que ver en
la agresión a los jóvenes que fueron atacados por un grupo armado en Xalapa.
Quizá sea como dice el comunicado de la
Secretaría de Seguridad Pública que nada tuvieron que ver en la agresión
Pero algo sí es seguro.
El desprestigio y la fama de represor que
tiene el gobierno de Javier Duarte hace que miles y miles de personas lo
consideren culpable del ataque.
La muestra, los miles de “me gusta”,
retuits, compartir y demás formas de socialización de las noticias que se
publicaron en diferentes medios del estado y del país e incluso en el
extranjero.
Javier Duarte como gobernador, Arturo Bermúdez como secretario de
Seguridad Pública, Luis Ángel Bravo,
como Fiscal General del Estado, pueden decir que no fueron ellos, que nada
tuvieron que ver, que….
¡Pero sí son ellos! los encargados de que
haya paz y seguridad en el estado, de perseguir a los criminales y someterlos a
la justicia… Y en estos campos han demostrado fehacientemente su ineficacia.
En cambio se siembran rumores.
Y otra vez, Javier Duarte, Arturo
Bermúdez y Luis Ángel Bravo, junto con todo el aparato del gobierno del estado,
pueden decir que ellos no son.
Los rumores que empezaron a correr, por
todo el estado, son dos, básicamente:
1.
Que los jóvenes agredidos
participaron en el ataque a las oficinas del INE en días pasados.
2.
Que el domingo habrá ataques
contra los votantes.
V
aya, del primer rumor incluso la
Fiscalía es parte actuante de los sembradores, tanto que los dos últimos
párrafos de su comunicado oficial dicen que “un grupo de vándalos cometió actos vandálicos
(SIC) agrediendo un módulo del Instituto Nacional Electoral (INE) en esta
ciudad capital” y que “en este contexto, se investiga si los hechos ocurridos
esta madrugada tienen alguna relación con las acciones cometidas en contra de
instalaciones de dicho organismo”.
¿En qué se sustenta la Fiscalía para
afirmar esto?
Si tienen indicios de que los jóvenes
fueron parte del “grupo de vándalos (que) cometió actos vandálicos” (la
redacción es de Comunicación social del gobierno del estado) ¿porqué no actuó
contra ellos antes?.
n caso de que este sea el móvil, ¿quién
sería el (la) interesad@s en atacarlos?, ¿el INE?, ¿van a investigar a los
funcionarios electorales y a los consejeros electorales como presuntos
responsables de la agresión?.
La Fiscalía (y e gobierno del estado) con
argumentos como estos lo que busca es criminalizar
a los jóvenes para justificar el ataque que sufrieron, como es su táctica en
los casos que cobran notoriedad. Tal parece que dicen: la víctima es culpable
de lo que le pasa.
El segundo rumor, de los actos violentos
el día de la elección, lo siembran quienes desean que los votantes no salgan, para que los comicios se resuelvan con el menor
numero de votos posible, lo que incluye a los que sean capaces de mover ellos,
los que desean que nadie vote fuera de sus huestes.
Y aquí también Javier Duarte y sus
funcionarios (habría que buscarles otra denominación porque no son muy funcionales) son los encargados y
responsables de que las elecciones transcurran en paz.
El INE carece de cuerpos de seguridad
pública para proteger la logística electoral, y es por eso que las policías de
cada estado y municipio, los cuerpos de soldados y marinos, los policías
federales, son los encargados de vigilar y preservar el orden en las
elecciones.
Así pues, con este panorama ¿cómo
esperaba Javier Duarte que no lo responsabilizaran directamente del ataque a
los jóvenes?.
Pero tiene una salida para demostrar que
ni él ni sus fuerzas represivas son
los responsables del ataque: atrapar a los culpables y esclarecer
fehacientemente los hechos, presentando incluso a los autores intelectuales y demostrando
el móvil de los hechos.
Nada más que hay muy poca confianza de
que esto se logre, porque la Fiscalía se ha mostrado muy, pero muy ineficiente
en la localización y captura de los criminales, primero, en el armado y
estructuración de los casos, después, y la penalización de los criminales que
detienen y que logran presentar ante lo jueces.
Los terrenales estamos a la espera de la
solución a este artero ataque.
Los que se dicen los grandes místicos,
deben resolver.
(Por cierto, como anotación al margen,
Javier Duarte desapareció del estado desde el 2 de junio; tal vez aparezca este
7 de junio para votar y decir que todo está en paz y en calma en el estado. O
sea, para repetir, con las mismas u otras palabras, que en Veracruz no pasa
nada)
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