Místicos y Terrenales
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La decisión vendrá del
centro: PRI
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¿Alianza Manlio-Fidel, para
el PRI?
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se va o no se va Buganza ¿se
va o no se va?
Marco Antonio Aguirre Rodríguez
La contienda por la candidatura del PRI
al gobierno del estado ya mostró sus lados oscuros: golpeteo mediático,
intentos de albazos, traiciones, alianzas oscuras, demeritar al contrario, ganas
de colarse, aumentar el numero de posibles contendientes de manera artificial,
alineamiento de grupos.
Vaya, hasta parece una serie televisiva
de intriga política.
A César Camacho Quiroz, presidente del
PRI nacional, buscaban empujarlo a que declarase que Javier Duarte sería el
factor final para designar el candidato al gobierno del estado por el PRI para
el próximo año, pero no lo dijo.
A César Camacho querían llevarlo a
incluir a Erick Lagos entre los posibles aspirantes del PRI a la candidatura
gubernamental en el 2016, y no lo hizo.
Durante una entrevista radiofónica a
César Camacho le preguntaron por el peso que tendrá Javier Duarte en la
designación del candidato del PRI a la gubernatura en 2016 y en lugar de
ponderarlo, lo eliminó. La decisión, dijo, llegará del centro, y será
transmitida por quien sea el próximo presidente nacional.
César Camacho e Ivonne Ortega, quien es
la secretaria general del PRI, formarán parte de la próximo bancada legislativa,
e incluso se menciona a César Camacho como el probable coordinador de la Cámara
de Diputados o por lo menos de la bancada del PRI.
Entonces, ¿quiénes tienen real presencia
en la capital del país de los que aspiran a la candidatura?. Sólo los Senadores
Yunes, José Francisco y Héctor.
Pero además son los únicos que han dicho
que buscan la postulación; los otros, quieren que se les incluya pero sin alzar
la mano, por si algo pasa quedarse atrás, alineados –si pueden- y decir: yo
nunca dije nada, siempre estuve con mi candidato.
Así, los otros que quieren encartarse hasta
hacen malabares en busca de que se les incluya.
Erick Lagos es uno de ellos.
Y en la misma entrevista buscaron que
César Camacho lo incluyese en la lista, pero insistió en que la decisión se
tomará en la ciudad de México.
En palabras claras: El fidelato, (los
seguidores de Fidel Herrera -incluyendo a Javier Duarte-) no tendrá capacidad
de imposición para el candidato del PRI en la contienda por la gubernatura del
estado.
A Erick Lagos le armaron varias notas
desde los medios que maneja la exvocera del gobierno del estado, Gina
Domínguez. Pero de ahí no pasó.
En cambio José Yunes, quien sí tiene
posibilidades de ser candidato, recibió una respuesta amplia vía redes sociales
al anuncio de que no aceptará un “veto”, si es quien está mejor posicionado
para ser candidato a gobernador de Veracruz.
Fueron más (muchos más) los posts de
apoyo que en contra.
Esa es una de las caras sucias de este
juego sucesorio, las zancadillas y los golpes desde oscuridad, buscando
derribar a quien no es el candidato del fidelato.
En cambio Héctor Yunes realizó una
declaración poco afortunada después del homicidio del abogado Enrique Álvarez, muerto
al acompañar a Martín Rosales, excomandante de la policía municipal de Cuitláhuac,
cuando lo asesinaron.
Dijo que este homicidio no mostraba ni
encendía focos rojos en la seguridad del estado, porque “focos rojos es cuando
comienza a rebasar el control del estado”.
Héctor Yunes probablemente no ha visto
los demás hechos delictivos que ocurren en la entidad, ni conoce la poca
efectividad de las policías para captutar delincuentes y ponerlos a diposición
de los jueces.
O ya ve tan normal los homicidios, que
considera que estos ya están dentro del rango de lo tolerable.
Como sea, la declaración del senador –que
sí tiene posibilidades de ser candidato del PRI al gobierno del estado-
despertó un rumor planteado desde hace mucho: una alianza secreta entre Fidel
Herrera y Manlio Fabio Beltrones, para que el segundo sea presidente del PRI
nacional y después aspirante a la candidatura presidencial para el 2018.
Manlio Fabio es el principal soporte de
Héctor Yunes.
La alianza incluye el dejar que llegue Héctor
Yunes como candidato al gobierno del estado por el PRI, y desde ahí tender un
puente de plata al fidelato para que se retiren con total impunidad y sin que
nadie los procese en serio por el saqueo al estado y el derrumbe de las
instituciones gubernamentales y sociales.
¿Qué tan cierta es la versión?, ¿una
alianza oscura?.
Esta es otra de las caras oscuras del
proceso sucesorio al interior del PRI.
Una cara más, es el demerito del
contrario, la descalificación.
A Gerardo Buganza, secretario de gobierno
en la administración de Javier Duarte, primero lo encartaron en la sucesión mediante
una publicación en Notiver, el lunes 15 de junio.
Luego Javier Duarte, ese mismo día, dijo
que la “rumorología” es “el deporte local” y que Buganza se quedaba.
El jueves se anunció que salía del estado
para un chequeo médico y los rumores acrecentaron
en el sentido de que en agosto deja el cargo para buscar la postulación,
incluso como candidato independiente.
El rumor creció y el sábado ya lo daban
como fuera del gabinete y diversos periodistas, algunos muy cercanos al aparato
de comunicación social, mencionaban que su puesto lo podría ocupar Elizabeth
Morales, Amadeo Flores o Enrique Ampudia.
Buganza primero fue Secretario de
Gobierno, luego lo mandaron como Secretario de Infraestructura y Obras
Públicas, mientras Erick Lagos ocupaba el cargo, y después lo regresaron a la
posición.
En la elección pasada le toco apoyar a
los distritos de Córdoba, Tantoyuca, Coatepec, Zongolica y Panuco. Todos se
ganaron para el PRI con operativos de última hora después de que las encuestas
mostraban una tendencia a la baja para este partido.
Ahora incluso lo acusaron de provocar
acciones que llevaron a la derrota de Ana Guadalupe Ingram, en el distrito de
Veracruz.
Paradójicamente, con la campaña de
desprestigio a Buganza lo apuntaron en la lista de los posibles.
Pero Gerardo tampoco ha dicho que sí
quiere ser candidato.
Entonces seguimos con sólo dos posibles aspirantes
por este partido.
La sucesión gubernamental en Veracruz
será mucho más cruenta que las anteriores, comenzando por la definición del
candidato del PRI.
Hoy existe un grupo aferrado al poder que
no lo quiere soltar bajo ninguna circunstancia. Quieren volverse los eternos
místicos, depredadores permanentes de los terrenales veracruzanos.
DESALOJO XALAPA 2000. La construcción de
viviendas en zonas de riesgo en Xalapa, llevó a que durante el transcurso de la
semana dos edificios de la unidad habitacional Xalapa 2000 fuesen desalojados
por el ayuntamiento, porque el laud en el que están levantados sufrió un fuerte
socavamiento, con lo cual amenaza el derrumbe de ambas estructuras.
Estos edificios, por estar construidos
sin la estructura de protección necesaria, en cada temporada de lluvia corren
peligro de derrumbe.
El ayuntamiento de Xalapa en el caso de
los vecinos desalojados aplicará la implementación de un seguro de vivienda
colectivo denominado “Mi hogar seguro”, el cual incluye hasta 65,000 pesos.
La medida es buena.
Pero sería mejor si el ayuntamiento
actual puede determinar quienes construyeron los edificios y quien les autorizó
el levantarlos sin las protecciones necesarias, aunque sea para conocer a los
culpables reales.
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