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miércoles, 9 de diciembre de 2015

Crucero Político



           México país de las conquistas
           Tlaxcaltecas unen a españoles
           Españoles matan tlaxcaltecas
                                                    
ESTÁ DEMOSTRADO QUE, CUANDO EL DEBIL SE UNE AL CONQUISTADOR SIEMPRE SERÁ EL ESCLAVO DE ESE CONQUISTADOR

Veracruz, Ver. Mx. Las conquistas en todo el mundo siempre se han dado con ayuda de los traidores, bien por ser éstos oprimidos por las castas en el poder o bien por ambicionar las mieles del poder que tienen sus opresores, así sucedió en México cuando arribaron a aquí las huestes de los hombres blancos y barbados, los cuales en la realidad eran la escoria del mundillo europeo que tenían en la península ibérica conocida como España, fue gentuza y escoria de la peor ralea que se encontraban hacinados en las mazmorras esperando a que les dictaran la sentencia máxima que era la pena capital, es decir, la muerte, y sus jefes los capitanes, primero Crisóforo Colombo o como es conocido; Cristóbal Colón y después con la famosa conquista Hernando Cortés o Hernán Cortés, quienes tampoco eran dechado de virtudes y sí tenían, como salvación, aventurarse a buscar las riquezas que tanto faltaban a las arcas de los reyes españoles después de tres siglos de esclavitud de la daga musulmana y, primero el Colón, con las últimas joyas que le quedaban a una reina humillada y vejada y un rey sin carácter ni entereza para, con inteligencia poder levantar desde la moral hasta lo económico a su patria, accede a que esa reina se desprenda de lo último que le dejaban las hordas musulmanas en aras de, con ansía, jugarse el azar de ver si resurgían un imperio ya perdido, así fue como esas hordas de presidiarios y maleantes de lo peor iniciaron esa  aventura de lo que, por aquellos, resultaba más que imposible de realizar, navegar por un plato llano donde al terminar éste caerían al precipicio abismal de lo infinito, sopesando la muy remota posibilidad de poder salvar la vida en esa encomienda o quedarse escuchar la sentencia donde perderían ésta sin remedio, decidieron subirse a asas naves para, vencido su miedo buscar mejor suerte. Y TUVIERON esa suerte deseada, la tierra no era plana ni se cayeron irremediablemente a los precipicios de los infiernos abismales, tocaron tierra y se toparon con autóctonos creyentes de sus leyendas que, sumisos, inclinaron la cerviz como bienvenida a los que ellos creyeron era, Quetzalcoalt o la serpiente emplumada que venía a proporcionarles el bienestar prometido después de su auto inhumación por beberse esa agua espiritual llamada pulque y, embriagado con esa agua cometer actos que jamás en su juicio hubiera cometido. Pero retrocedamos tiempo el tiempo, los españoles no fueron los primeros conquistadores de las tierras que actualmente conocemos como México, tiempo atrás otra raza proveniente de muy arriba de éste continente ya habían conquistado a los que sí eran oriundo de éstas tierras, desde los apaches y yaquis en el norte y para centro y sur los tlaxcaltecas, zempoaltécas y demás razas de éste territorio, esos conquistadores de éstas tierras fueron los aztecas, ellos sometieron y esclavizaron a los autóctonos antes que los peninsulares, de ahí se deriva lo que se cree fue una traición la unión de tlaxcaltecas y zempoaltecas para derrocar al imperio azteca creyendo erróneamente en los españoles.
Como ya pudimos darnos cuenta los tlaxcaltecas en modo alguno fueron traidores ni nada que se parezca, ellos y los otros pueblos trataron de sacudirse un yugo, pero cayeron en la trampa de los mentirosos peninsulares y sin más, acabaron por ser esclavos de quienes les prometieron libertad y mejor vida. ASÍ LAS COSAS, podemos observar y darnos cuenta del innegable hecho de que nuestro pueblo, desde antes de la llegada de los españoles viene viviendo esclavitud tras esclavitud, que somos un pueblo crédulo de los mentirosos que ya nos prometieron una vez y nos traicionaron, y mañana vuelven a venir a prometernos y les volvemos a creer sus mismas mentiras. LA HISTORIA NOS DEMUESTRA con hechos que los mexicanos siempre tropezamos con las mismas piedras una y otra vez, de ahí que siempre seremos presa fácil de quienes un día nos prometen y nos mienten y, mañana volverán de nueva cuenta a mentirnos y volveremos a caer en sus mentiras.


QUE AHORA BIEN, DESPUES DE ÉSTE REPASO POR nuestras historias vemos que de nada le ha servido al pueblo las enseñanzas vividas, toca ahora a los ya nacidos aquí ser verdugos de los mismos hermanos, pero ahora transformados en POLÍTICOS, y recordemos que son las mismas definiciones de; corrupción, mentiras y traiciones, y quizá haya más en nuestro idioma acepciones y sinónimos que nos indiquen lo mismo, pero por hoy con esas pruebas podemos seguir el espacio. LAS ALIANZAS de un panismo y un perredismo tienen similitud con el ayer, pero ahora las alianzas que hacen hoy éstos partidos semejan la llegada de los peninsulares, pero con la variante de que ahora si se conocen entre sí los que hacen éstas alianzas, los perredistas han vivido y recibido de los panistas, desde insultos, menosprecio y humillaciones desde el inicio de ese partido llamado también del sol azteca, y con todo y ello van unidos a quienes saben perfectamente que jamás les cumplirán las promesas que hoy les hacen, y que, el supuesto caso de que logren derrotar a quienes consideran como su más acérrimo enemigo,  ese hombre blanco y barbado que compone al partido azul les habrá de dar la misma patada por el trasero que ayer le diera a los que, según los del PRD fueron sus ancestros, es decir a los aztecas. Si hace ya casi mil quinientos años el hombre blanco y barbado no les cumplió, hoy menos lo hará, el autóctono no se quiere dar cuenta de que hoy, los azules, son descendientes directos de aquellos peninsulares que arribaron con la peor ralea existente en aquellos años, y que, por consiguiente tiene las mismas muy pésimas mañas de sus ancestros, por lo tanto, suponiendo sin conceder que hubiera éxito en esa aventura, los eternos perdedores serán los autóctonos mexicas, volverán, sin duda alguna, a sentir en sus carnes el desprecio del hombre blanco y barbado. Hoy que van por lo que creen será su conquista todo es miel sobre hojuelas, les invitan a su misma mesa en aras de ganarse su simpatía pero, más que nada, su credibilidad, sin embargo, si llegaran a triunfar verán que todo fue un sueño y caerán al suelo sumidos en el dolor de saberse una vez engañados por ese hombre blanco y barbado. Y COMO ESTO ES un cuento de nuestras historias mexicanas hasta aquí le llegamos esperando les haya gustado y dejamos como ya es costumbre las modernidades tratando de servirles: http://crucero-politico.blogspot.mx loyocrucero@hotmail.com , loyocruceropolitico@yahoo.com.mx , Twitter @LoyoOchoa  Facebook joseluisloyo1 y su portal de internet: www.cruceropolitico.com.mx  donde con el mejor de los gustos esperamos poder servirles, y recuerde que es la historia misma la que nos enseña que siempre es repetitiva, que los seres humanos no aprendemos y que siempre tropezamos con la misma piedra sin ver a donde pisamos. Mil Gracias.      

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